El acusado acepta dos años de cárcel al reconocer que agredió sexualmente a la víctima cuando dormía

Un control fronterizo en La Junquera (Cataluña) identificó hace unas semanas a un hombre -Danko Nicolae (Bulgaría, 1985)- al que le constaba una orden de detención al permanecer en paradero desconocido después de que la Policía le detuviera en diciembre de 2023 en Zaragoza. La denuncia que le llevó a los calabozos la interpuso una mujer de 37 años a la que le paseaba el perro y con la que compartió una velada nocturna en su casa.
Pero la cita terminó de la peor forma posible después de que la mujer ingiriera una pastilla que le suministró el varón, momento en el que quedó completamente dormida hasta que despertó y vio cómo este búlgaro se encontraba desnudo encima de ella y refrotándole sus genitales. Ayer, el acusado reconoció los hechos ante la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Zaragoza y aceptó una pena de dos años de cárcel como autor de un delito de agresión sexual.
Estos fueron los términos del acuerdo suscrito entre el ministerio fiscal y el abogado defensor, el letrado Alberto Peiró, y que también recoge la imposición de una orden de alejamiento de 300 metros durante tres años y el pago de 1.000 euros de indemnización en concepto de responsabilidad civil por los daños morales ocasionados a la víctima. Sobre él también pesa la prohibición de desarrollar cualquier actividad que conlleve un contacto directo y regular con menores durante los próximos cuatro años. Inicialmente, la Fiscalía solicitaba una pena de hasta cuatro años de prisión.
Los hechos referidos se remontan a la noche del 30 de diciembre de 2023, cuando el ahora condenado y la víctima concertaron una cita en la casa de la mujer. Allí tomaron unas cervezas hasta que la mujer le pidió una pastilla a Danko Nicolae para dormir, un comprimido que el varón le entregó sin que finalmente se haya podido demostrar su composición. Lo cierto es que la mujer quedó completamente dormida tras ingerir la pastilla, y cuando despertó, se encontró al procesado desnudo mientras refrotaba los genitales en su cuerpo.
Tanto es así que los médicos forenses hallaron restos de ADN del acusado en el cuerpo de la víctima, concretamente en la zona de sus partes íntimas pero no en el interior de la vagina, de ahí que no se le haya acusado de penetrarla. Por estos hechos fue detenido a finales de 2023, y al quedar entonces en libertad provisional, marchó a su país de origen sin dejar rastro alguno de su paradero. Y ante la imposibilidad de citarle a declarar para el juicio señalado ayer a las 10.30 horas, se dictó una orden de búsqueda y de detención que se ejecutó a principios de este año al identificarle en la frontera entre Francia y España. Desde entonces permanece interno en el centro penitenciario de Zuera, adonde regresó ayer tras reconocer los hechos, si bien solicitará la suspensión de la condena al carecer de antecedentes penales.
Fuente: El Periódico de Aragón (18/03/2025) y Heraldo de Aragón (18/03/2025)